Natafeoc

Soñando entre ruedas.

Tus tiernas canas plateadas,

dan luces a tu gran sabiduría

Y tus grandes consejos quedan

Impregnados en nuestros pensamientos,

como el aroma a café en las mañanas.

 

Mi viejo, mi querido viejo

Doy gracias a Dios por tu vida

Y tener la fortuna de admirar,

esas líneas en tu rostro

que constituyen la respuesta

a vivir intensamente.

 

Tú dices que soy el motor de tu vida

Y yo digo que eres mi persona favorita

quien te ayudará a empujar esa silla

donde cada mañana,

te vales para recorrer

las baldosas color marrón y

te acercas a admirar la belleza de las flores.

 

Sigue mi viejo soñando entre esas ruedas

Dando tu mejor cara en este devenir del destino

Sigue soñando despierto y

comparte conmigo tu deseos,

que, con determinación, fe y mucho amor;

yo desde la distancia los haré realidad.