Mercedes Bou Ibáñez

Dignidad ante todo. Hoy con dos anécdotas

 

Dignidad ante todo

De mi libro: Cuentos para no dormir
Cualquier parecido con la realidad,
es pura coincidencia, o no.

Ante todo he de aclarar
que nunca fui mujer de flores,
de escuelas más bien muy poco,
pero, gustaba escuchar
a todos esos señores
que saben largar el moco
hablando con seriedad
y no a esos zascandiles 
que juzgan sin preguntar
presumiendo de Quijotes,
de caballeros templarios
o vaya a saber usted
de que vana mezquindad.

A decirme me vinieron
que no debiera escribir
en libros de mi autoría
poemas que yo escribí
de amigos en medianía
ni aún respetando el nombre
así como su autoría.
Creo que el hombre creía
que  yo no pedí permiso
para obrar \"tal felonía\".

Para pensar de ese modo
hay que ser tonto del culo,
tanto quien se lo asomó
como quien siguió ese bulo,
¡qué pena, quien no aprobó
ni primero de garrulo!

Esta noticia me dieron
estando en el hospital,
al ver tanto gilipollas
casi de golpe curé
y de paso recordé
el dicho aquel de mi abuelo:
Lo malo no es ser idiota
es el no querer luchar
para sentar la pelota
si no la sienta la edad.

Nada o muy poco estudié,
con lo que sé bien me apaño,
 no envidio nada de aquel
que no sabe ni un carajo,
pero, presume de juez
sin saber ni la del galgo.

Muchas cosas aprendí,
otras me las inventé,
 a poco creciendo fui,
y dándome cuenta qué;
para poder ser feliz,
no te dejes engañar
ni tengas por que mentir
ni juegues a decidir
acciones de los demás
por lo que oyeras decir.

Cuando me siento alabar
sé que algo buscan de mí,
de halagos no quiero oír,
ni siquiera un susurrar
que suelen dar malos pagos
si no los devuelvo al fin.

Recuerdo a mi tía Rosa
que halagaba las gallinas,
les decía, con esmero;
estás rolliza y hermosa,
pero eso era una pamplina
para meterla al puchero.

Con la verdad por delante
cabes en cualquier lugar,
tan solo te harán desplante
aquellos cuatro tunantes
que viven del figurar
y en el fondo envidiaran
ese  porte y ese talante
que marca tu dignidad.

Mercedes Bou Ibáñez

Posdata anecdótica: Sirva como 5ª anécdota

  Lo que cuenta esta publicación es real, o lo parece, ¿quién sabe?
Hubo un tiempo que hacía poemas con amigos,
con dúos, con tres o cuatro usuarios a la vez
en alguna ocasión, y les pedía permiso, por supuesto,
para incluir sus colaboraciones en mis libros impresos,
y en mis vídeos, publique todo lo de quienes me dieron permiso, 
y me acusaba un hombre de estar haciéndome rica
a costa de otros, ni se molestó en averiguar
que no tengo el canal monetizado,
ya que para monetizar, no se debe poner nada con copyright
y como es algo que no me preocupa, toda la música que pongo
tiene derecho de autor, así que de mis vídeos si alguien
se pudiese beneficiar, serían los dueños de los derechos musicales.


Y en cuanto a mis libros (de autoedición, me los hago yo misma)
quienes conocen de verdad este mundillo, saben que se pierde tiempo
y dinero, ya que a mí me toca pagarlos si los quiero tener,
y si quiero que amigos y familiares los tengan, tengo que regalarlos.
No son tiempos de vender libros.
 
Pues un señor muy \"listo\", me denunció en carta publica, 
dijo que yo tomaba cosas de usuarios en beneficio propio.
pobre hombre, y resulta que por aquellas fechas estuve
ingresada en el hospital (18 días) sin acceso a mi ordenador,
cuando volví al foro, había dos cartas contra mi persona,
en la segunda me trataban de sinvergüenza, por no dar la cara
a la primera carta. Esto me costó otra expulsión, porque
a la criaturica lo puse a bajar de un burro.

Testigos quedan, que podrían dar fe de lo que cuento, 
si tuviesen el valor de hacerlo.