SED Y HAMBRE
Quién tiene tanta sed de cariño en este día,
en que se ha secado el alma de tanto esperar
que llueva a borbotones cuando gota a gota
las lágrimas resbalan por las mejillas hasta
refrescar las comisuras de los resecos labios.
Quién tiene tanto hambre de amor en este día
en que el odio se atrinchera en el corazón
que se encabrita latido a latido y arremete
ordenando a la gris sustancia a actuar con
la blanca que se desliza irrumpiendo la calma.
Quien tiene tanta ternura demás en el pecho
en este día para aplacar todas las faltas
en que el alma de tanto esperar fallece
de sed y hambre, de amor y de cariño.