Pecho sin Fortuna
Hombre, mi hombre,
y en el pecho sin fortuna,
arde la luz de luna,
cuando sabes mi nombre,
y soy la de la cruz bendita,
cuando sin ser infinita,
arde el tiempo y más en el cuerpo,
cuando el velo de amor,
ya está perdido entre zagaz ventura,
de frívolo deseo,
cuando eres la tortura,
como lo que más poseo…
Por: Srta. Zoraya M. Rodríguez
EMYZAG