Patricia Aznar Laffont

Beso de Judas

Rostro Quebrado

que Invierte el Día.

 

Rostro- Alma Salvajemente Herido

 se Asoma a los Umbrales de mi Puerta.

 

Abierto a los Sones 

del Campanario del Veneno de Humanidad

que Arde en los Lodos de Odios 

y las Hieles de la Envidia.

 

Veneno de Humanidad

que Cuaja el Denso Aire

de Mis Días.

 

Piedras y Lanzas, Danzan en el Interior de mi Alcoba.

 

Maligno, en la Diversidad de los Tiempos.

 

Inyecto de Maldad,

Atrapa las Aristas

Torcidas de mi Tiempo.

 

Haces Tumultuosos.

Tormentas Heridas.

Hambre y Sed de Venganza.

 

Ya no Arderán las Ardidas Heridas.

 

Sólo Soy la Némesis que Busca

 Justicia

la Némesis que se Yergue en Mí

y Maldice,

se Hace Daño

en el Revolcón de los Feroces Recuerdos

pero que se Jura que Nunca Jamás

Llorará lo Perdido.

 

Arrinconada en la Celda

del Rincón de mi Alma,

el Beso de Judas

Espera, sin Esperar,

su Esperada

Hora...

 

(Patricia)