Cuando son repetitivos
los recuerdos del pasado,
debemos tener paciencia
que algún día serán borrados.
Unos son muy agradables
otros nos dejaron narcados
y nos causan preocupación
son errores del pasado.
Los recuerdos desagradables
regresan sin ser invitados
y tenemos que convivir con ellos
para no vivir atormentados.
Cuando uno menos lo espera
los recuerdos dicen presente,
pero no debemos desesperarnos
son juegos de nuestra mente.
Nuestra mente es poderosa
cuando uno ha madurado
y no hay porque preocuparse
por recuerdos que son pasado.
Todos esos recuerdos
que no han Sido olvidados,
siguen flotando en la mente
como fantasmas del pasado.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,01/05/2024.
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