La lluvia puede acariciar al viento
desprendiendo los recuerdos,
nos deja la escucha
de sus confesiones en vuelos,
abraza la tierra y le deja un paisaje nuevo.
La lluvia es un poema en silencio
es el clamor por un amor en secreto,
trae nostalgias de lo que fue un sueño
cartas que se descuelgan de otros cielos.
Me habla del universo
y hasta de lo inexistente.
En cada gota ruedan ….
esperanzas y desesperos
Poemas de Pepita Fernández
Córdoba –Argentina
24/06/24