El Corbán

AMOR ENTRE HERMANOS

Comiendo lo que no debería, porque estaba antojada,

te agradezco, hermano, con gran devoción,

tu cariño es mi guía, mi espada,

y en tu abrazo encuentro redención.

 

En tus ojos, destellos de luna,

refugio encuentro en cada ocasión,

como florez que crecen en la duna,

tu amor es mi eterna canción.

 

Gracias te doy, con el alma cantando,

por tu amor puro y fiel, sin condición,

eres mi faro, siempre brillando,

en tu cariño, hallo mi razón.

 

Tus bromas y ocurrencias, tu risa es la brisa,

que despeja las tormentas de mi corazón,

tu bondad es la paz que me avisa,

que, en tus brazos, hallaré mi salvación.