Soy de los que creen
Que para el sexo
Se ocupa de todo,
Pero no amor…
Se sienta, huela y sepa
El deseo, sin duda alguna
Con el brillo que da la lujuria
Adornado de pasión.
Invito noblemente a la decencia
A abandonar la conversación
en este altar al deseo
serán penetrados todos los valores
Que acompañan las buenas intenciones
Y los modales aprendidos en casa.
Es aquí donde no se juzga,
donde en el exceso
se vive el respeto
Y en los muslos se vive a plenitud…