Mercedes Bou Ibáñez

Te espero amor,  en la esquina de un verso

 

Te espero amor, 
en la esquina de un verso

Con estrofas de métrica 8 
y estrofas de 11 
hechas con mezcla de rimas asonantes,
consonantes y libres.
Sin esquema fijo.

Vivo forjando los sueños
con acero de esperanza
en la llama de la fragua
por tus ojos encendida,
como estrella que va guiando
mis pasos por el camino,
haciendo corta la ausencia,
en riña con el silencio
que me esconde tu presencia.

Añoro amor la savia que rezumas
y el hilillo de ctar en tus labios,
que me ayuda a vencer malos presagios
de todas esas horas tan profundas
cuando maldito el viento me recuerda
¡qué a mi lado no estas, qué ya te has ido!
Y dibuja tus besos en la niebla
para sacar mi alma del olvido. 

Pero sigue tu esencia en el ambiente,
en la corteza húmeda del viento, 
en el olvidadizo hilo del río,
en las ondas magnéticas del sueño,
en el eco lejano de un te quiero.

Ayer vi que me esperaba
tu último verso en la esquina,
el verso aquel de mi mar
que llevó el beso a tu orilla,
se puso en mi hombro a llorar
junto al farol que ilumina
el banco donde aquel día
me juraste eternidad,
en la fresca amanecida
de sabor a sueños locos,
allí donde el corazón,
sediento ya de tus besos
bebió en tus labios a sorbos,
la ambrosía de la vida,
esa que nos gira el coco.

Me podrá abatir el tiempo,
aumentando mi dolor,
podrá robarme la calma,
mas no robará mis sueños
ni matará la ilusión,
esos por siempre andarán...
allí donde vaya yo.

Te esperaré en el alba que ilumina
la flor madrugadora del cerezo,
en el azul del fruto de los sueños,
en el manso latido, de mi pecho,
y junto al verso aquel de nuestro mar.
Ahí amor, ahí siempre yo te espero
y en la fresca ilusión que se renueva
cada nuevo y hermoso despertar
sin dejar a los duendes del recuerdo
que se ceben matando mi soñar.

Ahí te espero amor, 
en la esquina... de nuestro último verso.

Mercedes Bou Ibáñez

Posdata:

Sobre rimas, como yo lo aprendí.
Uno de los primeros consejos
que se suele dar a los alumnos
en poesía, es que intenten evitar
el poner 4 rimas en consonante seguidas,
pues se suele producir un sonido
machacón y repelente.

Hay unas estrofas llamadas de:Cuaderna vía 
(14 o 16 sílabas)

Don Sancho, obispo de Ávila,/ que fue señor muy honrado, 
que dio muy buenos ejemplos,/ porque fue muy buen prelado. 
Fizo aqueste monasterio,/ de San Benito llamado, 
y diole muy grandes algos,/ por los que  fue sustentado.
(Del libro del buen amor del Arcipreste de Hita)

Estas estrofas si rimaban en cuatro consonantes iguales,
pero al ser en versos muy largos
se disimulaba, un poco, ese sonido machacón.
Cuatro rimas iguales en versos de arte menor
suenan horrible. 
Bajo mi punto de vista y el de más gente, 
quizás haya quien no lo vea de ese modo.

Os lo digo en verso.

Yo aprendí que en el rimar
se debe siempre evitar
cuatro rimas colocar
para oídos no cansar.

Cuatro rimas son cansadas,
pues suenan como a forzadas.

Desmerecer no pretendo
a quien las guste de usar
mas para mí... son pesadas.

No peco de atrevimiento
por decir lo que yo siento.

Por mucho el algo alabar
nunca se podrá lograr,
poder llegar a triunfar
con cuatro iguales rimar.

Que todo escrito en la red
es como escrito en pared.

Y nunca a ningún invento
se le debe valorar
solo por calmar la sed.

En reglas de poesías
aprendí en mis tiernos días
que solo son tropelías
más de tres rimas \"seguías\".

Cuatro rimas consonantes
suelen ser muy disonantes.

Por eso le digo qué;
dejemos las fantasías
solo para nigromantes.