Carlos Ojeda

No te demores.

No te demores.

 

Que paz, ni que calma!

rompe mi silencio

con el escándalo

de tu risa,

ven!, ahuyenta

a la soledad y su tedio

que la melancolía

se vaya

olvidándose de volver.

Aprecia en mi

el buen semblante

las ganas de decir

lo que por ti siento.

Ven, enséñame

a repetir tu nombre

que en mi corazón

se producirá un eco

por lo vacío que está.

Ven, y, no te demores

todavía se está a tiempo.

         Amor mío.