No te demores.
Que paz, ni que calma!
rompe mi silencio
con el escándalo
de tu risa,
ven!, ahuyenta
a la soledad y su tedio
que la melancolía
se vaya
olvidándose de volver.
Aprecia en mi
el buen semblante
las ganas de decir
lo que por ti siento.
Ven, enséñame
a repetir tu nombre
que en mi corazón
se producirá un eco
por lo vacío que está.
Ven, y, no te demores
todavía se está a tiempo.
Amor mío.