Pilar Luna

LOS DIFUNTOS DEL DESPOBLADO

Últimamente,

cuando preparo el almuerzo

decenas de muertos 

atraviesan las paredes

y se invitan a comer.

No los puedo controlar.

Dicen que en el cielo

se vive fenomenal,

pero si quieren ligar

se tienen que casar.

Les permiten regresar

y con ellos han enviado

al cura y al sacristán

para vigilar la moralidad.

 

No tengo presupuesto

para alimentar a tantos

y los he puesto a trabajar.

Cultivan el campo

y los huertos están a rebosar.

Como manejan los elementos,

nunca el pedrisco caerá,

las heladas terminan en enero

y llueve cuando tiene que llover.

No hay camiones para tanto cereal.

!Me voy a forrar!.

 

Las elecciones son democráticas

para elegir a la Corporación Municipal,

siempre soy alcaldesa

por ser la única que tiene

Documento Nacional de Identidad.

También he abierto el hotel,

y vienen autobuses

de Alemania, de Francia

y hasta de Portugal

ya que todos quieren copiar

nuestra organización municipal.