Soy isla entre la multitud
eco de albedrío ausente.
¿Dónde encalló el triste puente?
¿A quién cedió su virtud?
Es sueño de juventud
querer un amor eterno
que sobreviva al invierno,
que llega sin hacer ruido
a lomos del cruel olvido
que precede al negro averno.
En soledad crecen ramas
de los besos malgastados
nacidos en los pecados
cuando deseas y no amas.
La piel cubierta de escamas
oculta las cicatrices
de nuestros días felices
donde la miel no acababa.
El jilguero no cantaba
se le secó sus raíces.