Texi

Piano

Despacio,  tocame, lentamente. Con suavidad,  desliza sobre mi tus manos.

Y sonará,  mi voz tal  melodía, que sellarás tu alma con la mía. 

Con brío y ligero,  con la intención  de un torrente. Cayendo como el chorro de una fuente. Sucumbiendo a nuestro volcán  ardiente.

Somos dos, como un cielo,  abarcando un paraíso.