Pienso en ti, como si no me doliera el pecho.
Como si mi corazón no brincara asustado por todo lo que sueño contigo.
Pienso en ti, como si la simple idea de no hacerlo fuera incorrecto.
Como si siempre hubiera sido así, pensar en tu esencia.
Pienso en ti, como si la estrella más brillante que me acompaña fueras tú.
Como si la verdad siempre estuviera contigo, aunque me gusten las mentiras y lo que conllevan.
Pienso en ti, como si yo no hubiera muerto en tu propio recuerdo.