Anne Black

La amante no

No te ilusiones, pues ellos nunca escogen a la amante. Viven el romance y te llenan de poesía, pero óyeme, ellos nunca escogen a la amante. No construyas falsas esperanzas, no juegues el papel de inocente. No te dejes engañar, juega su juego y busca ganar. Piensa como él, tira la misma carta y no caigas en la trampa; (quiere que te enamores para tenerte cuando le apetece). 

Cuando la familia y los negocios lo desborden, él te buscara para desprenderse del mundo verosímil. Pero ten por seguro, que dormirá con su mujer al final de la noche y tú te verás ridícula en una cama casi vacía, con un lado frío que conserva su sombra, nada mas.  

No te llenes la boca de promesas vacías, pues nunca las dejan, nunca retoman la marcha fuera de la casa, fuera de sus esposas. Porque ellos nunca escogen a la amante.

Cuando menos te lo esperes te reemplazara por alguien más joven, una niña tonta y presa fácil. De esas que con solo un hilo de cursileria se enamoran de su cazador. Y tú serás una más en la lista, una de tantas que han pasado por la misma cama, en el mismo hotel. Absorbiendo sus mentiras y soñando con el día en que será solo suyo. Pues no seas estúpida, ¿a cuántas les dijo lo mismo? 

Deja de presumir que te ama, los viajes que han hecho y harán, los hijos que tendrán. Solo mírate, eres el hazme reír de tu comunidad; acéptalo, nunca serás la única en su vida. Luego no digas que no lo sabias.  

Pues ellos nunca escogen a la amante.