Santiago AlboHerna

FIESTA

 

Fiesta en el principio del mundo

y en los albores de la humanidad

Fiesta en cada segundo

y fiesta será el final.

 

Fiesta en ese vuelo de la mariposa

coqueteando entre las flores

en esa explosión de colores

que tanta belleza reboza.

 

Fiesta en la montaña majestuosa

coronada de nieves eternas

y en sus ríos que semejan

collares que la adornan.

 

Fiesta en el arrullo del arroyo que serpentea manso

bajando la montaña entre honores

que alegremente le rinden las flores

hondeando sus siluetas por la brisa del remanso.

 

Fiesta en la mirada del niño inocente

en su demanda impaciente

en sus travesuras diarias

y en su sinceridad lapidaria.

 

Fiesta en esa noche de relajo

de familia y amigos sin etiquetas

con nombre propio y sin caretas

que hoy y siempre están a mi lado.

 

Fiesta en los pantanos

en los ríos y en los prados

en las montañas y en los llanos

en su cuerpo y en mis manos.

 

Fiesta en la mujer que amo

en su boca que dice sin palabras

en sus cabellos, en su mirada

en sus pies inquietos y delicados

que junto a los míos transitan los años.

 

Fiesta en el reencuentro

que pensaba perdido

entre sus dedos y los míos

inolvidable suceso.

 

Fiesta en sus ojos pardos

en su piel de seda

y en la lubricada cueva

donde entre alucinado.

 

Fiesta en esos cuadros

que pintaba en la arena

aquella noche de luna llena

preludiando un maravilloso verano.

 

Fiesta en sus sencillas palabras

que animaban mi alma en pena

que me sacaron de la siesta

donde estaba mi suerte echada.

 

Fiesta en ese interminable cielo

que me sostiene con sus dones

que me quita los rencores

y me hace andar contento.

 

Fiesta tengo en la tierra

                 pero mas tendré en el otro mundo

                                                             donde llegaré moribundo

                                                                         pero no sin antes, cumplir con mi tarea.

 

                                                                                                                                  SANTIAGO ALBOHERNA