UN ABANICO DE PROBABILIDADES.
Es probable, que ya, no me recuerdes,
no pretendo, que en tu memoria me conserves,
de la misma forma, en que yo te conservo a ti,
sería una cruel coincidencia, tan solo, vivida en mí.
No solo es probable no, es casi seguro,
que el acaecimiento perenne de mi futuro,
te haya pasado como un ave migratoria
sin dejar rastro dentro de tu memoria.
Pero tú eras y sigues siendo aún mi musa,
el apoyo infinito que por almohada se usa,
el programa al que acudo, si vivo algún lance,
la emergencia que me hace, quedar en trance.
Es probable que no sepas, que convivo,
que me acuesto, y que me levanto contigo,
cada hora y cada día en mi memoria,
día tras día repitiendo la misma historia.
Es más que probable, que por ti volviera,
a escalar muros allá por donde anduviera,
y que creara conflictos, dada mi inseguridad,
con peripecias atenuantes, por la eventualidad.
Y es más que probable, por mi desolado aspecto,
que la ley se interpusiera, para… cargarme el muerto,
en mi defensa, me exculparía de todo, por mis sentimientos,
siempre así, lo exige el guion, y los acontecimientos.
En mi locura persecutoria todo lo intentaría,
a sabiendas, que una y otra vez, fracasaría,
pero una y mil veces, lo volvería a intentar,
lo que parecería el cuento de nunca acabar.
Es más que probable… que un día te des cuenta,
de que siempre para ti, tengo mi puerta abierta,
mi puerta, mi castillo, y mi corazón anhelante,
todo lo que soy y tengo, te lo pondría delante.
Solo me detendrá, la extenuación final,
así seguro será, para mi bien o para mi mal,
pero sea en este mundo, o sea en algún otro,
allá donde me encuentre, pensar en ti, será poco.
Tú eres mi desasosiego, mi tormento, y mi posibilidad,
lo que por ti yo diga o haga, nunca será casualidad,
quererte en la paz y en la guerra, es otra probabilidad,
quererte a ti como te quiero, es más que una realidad.