Caminos
Al avanzar por la vida
lleva mochila liviana
de buenos recuerdos llena
para aquietar la nostalgia.
Se irán abriendo caminos
donde las flores exhalan
los aromas del destino
entre pendiente y quebradas.
Las caídas son tropiezos,
pero impulso y a la carga
tras los muros del fracaso
hay jardines de esperanza.
Cuando no encuentres jardines
y sean piedras lo que pisas
recorriendo los caminos
se bordean las cornisas.
Busca un lejano horizonte
tras los bosques de la duda
para abrevar en vertientes
donde el sosiego es ayuda.
Ten a mano una pregunta
algún libro por leer
sonrisas para ofrecer
y emoción para el asombro.
Tu actitud será el cincel
que profundice la huella
tras el sendero que lleven
los pasos de tu presencia.
Si tu corazón sensible
flaquea ante la ternura
quítale la armadura
si la razón se resiste.
Extiende la mano abierta
para dar o recibir ayuda
el alma no tiene duda
de las dos siente caricias.
Cuando los fuegos del tiempo
derramen en tu cabello
cenizas de lo vivido.
Ponle calma al recorrido.
Encuentra un lugar certero
dónde narrar las vivencias
sin hacer de eso una ciencia
pero contar cómo ha sido.
Así sembrar la memoria
para quien siga el camino
transmitiendo cada historia
sin que la alcance el olvido.
Memorias de tiempos idos
con marcas de hilo de plata
esparcida a nuevos rumbos
al caminar las distancias.