No sé ni cómo ni cuándo empezó
Este amor que parece eterno
Desde lo llano hasta lo prominente
No logro sacarte de mi mente
Entre miel y hiel florece cada día
Nuestro amor en tus caricias halla alegría
En nuestro encuentro hallo mi paz
Tú, mi compañía y mi anhelo, ¿dónde estás?
Aguardando por ti cada día
Espero, contándote mis días
Pero con esta lejanía siento agonía
Tantos dulces recuerdos nos dejamos
Nos dijimos adiós, pero con la promesa de volver a estar unidos
Nos convertimos en parte de un solo destino.
Como brújula nos encaminan a nuestro encuentro.
Y nos guían por las sendas del destino
Quiero hacer mi nido contigo
El altar será testigo de nuestro amor
Y nuestros hijos serán la clara expresión
De nuestras almas unidas hasta que la tierra reclame lo que le pertenece.
Quiero estar contigo de eso estoy convencido.