Llueve
llueve
sobre las esquirlas de los vidrios esparcidos
por calles transitadas,
sobre los niños jugando en los parques
Llueve
sobre mendigos con pies sangrantes
mientras caminan bebiendo vino barato.
Llueve, llueve
sobre parejas de adolescentes enamorados que aún creen en el romanticismo,
en el amor para toda la vida.
Llueve, llueve
sobre jóvenes que ya no esperan nada, que nunca supieron el significado de la palabra ilusión ni conocieron ninguna moral
porque fueron olvidados, despreciados por una sociedad egocéntrica.
Llueve, llueve
tras los tejados de uralita
tras los tejados de pizarra
tras los tejados de hormigón
tras los tejados de adobe
Llueve, llueve
sobre personas satisfechas de sí mismas
sobre personas llenas de dudas
sobre gente altruista
sobre gente egoísta
Llueve, llueve
sobre asesinos que nunca dejaran ya de serlo
sobre gente ejecutada
con permiso y apoyo de gente bien pensante.
Llueve, llueve
sobre gente que ha nacido con el estigma de tener un color diferente al blanco.
Llueve, llueve
sobre gente que navega con rumbo en sus yates
sobre gente que va a la deriva en pequeñas lanchas abarrotadas.
La lluvia, siempre la misma lluvia en un mundo que no comprendemos