FRANCISCO CARRILLO

LUIS O LUISA¡

Hoy me invitan a salir

mis amigos, los de siempre

hoy me llaman de repente¡

dicen que vienen por mi.

 

Rebusco en el armario

la ropa de los domingos,

mi madre, no la ha lavado

no tengo ni calzoncillos.

 

A ver ahora que hago¡

y con que ropa me visto,

pronto llegan mis amigos

y no tengo ni un mal trapo¡

para vestir, que este limpio.

 

Como soy muy apañado

y mi verguenza es sobrada,

busco dentro del armario

en el cuarto de mi hermana.

 

Lo primero son las bragas

y un corsé muy apretado,

zapatos de tacón alto

camisa de seda y falda.

 

Como no me veo bien

la cara me la he pintado,

los ojos en azulados

los labios color miel.

 

Un bolso a juego también

en un hombro me he colgado,

dos pendientes que son aros

y una flor en mi sostén.

 

Ahora, si estoy preparado

un poquito de perfume,

en mi cuello maquillado

y un poco de laca puse,

en mi pelo bien peinado.

 

Mis amigos han llegado¡

y en la puerta los recibo,

la cara que han puesto ha sido

poco menos que asustados.

 

Le explico lo sucedido

que mi madre no ha lavado,

pero ellos extrañados

aceden y así salimos.

 

La verdad no los culpo

mas de uno abofeteé,

cuando sus manos noté

restregadas en mi culo.

 

Aunque también es verdad

que muchas se me acercaban,

y en la barra de aquel bar

a cervezas me invitaban.

 

Que bien me lo pasé¡

esa noche disfrazado,

y a esas que había al lado

con cuidado, restregué.

 

Me di cuenta enseguida

que si uno es mujer,

puedes tocar lo que pidas

sin que ninguna lo impida,

y esa noche, yo me hinché.

 

Al recogerme de noche

mi madre estaba esperando,

me dijo que había lavado

camisas y pantalones.

 

Mama¡ quiero que compres

de mi talla, mas vestidos

y zapatos de tacones

y pendientes, y un anillo¡

 

Que si me ves transformado

no te asustes, no hay peligro

pero es que he disfrutado

y he tocado lo infinito.

 

Así, que este domingo

vuelvo a salir disfrazado,

porque de gala vestido

no me como ni un torrado.

 

Y tú, papa que me miras

con la cara de asustado,

ahora, tienes dos hijas

si mis tetas son postizas,

no es postizo lo de abajo.

 

Así, que dame un abrazo

y déjate ya de risas,

desde hoy, seré Luisa

el Luis ya se ha acabado.

Para que? si Luis no liga¡¡