Está todo tan delante de nuestros ojos
que caminamos por la vida obnubilados
de tantas sensaciones,
encuentros, despedidas, responsabilidades
y hacemos cabriolas con lo que debería ocuparnos.
Y así ocurrió todo
como si no hubiese sucedido;
desde el principio,
la misma luz,
las nubes esparcidas con colores bellos,
el alma danzando en tu mirada,
el fuego del roce de nuestras manos
y el blue del cielo
acurrucándonos
con el corazón latiendo a mil flores
y fragancias,
inundándonos.
Para qué avanzar.
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