Yo no te conocía pero siempre te quise,
siempre soñé contigo.
Te esperaba en los corredores, en las calles,
hablaba de ti en las noches cuando recordaba un momento que nunca viví,
Pero que imaginaba incansablemente.
Lo invocaba cada letra;
El ritmo nostálgico de esa canción que no era mía, pero que vivía en mi alma.
No se en que momento lo adopté;
olvidé la calle por donde pasaba perdido, melancólico, abandonado,
lo recogí en mis brazos
y se arraigo a mi corazón.
Ahora recorre las calles de mi cuerpo,
busca sin sentido la calle donde lo sacaron,
El punto donde empezó a rondar sin rumbo.
Sigue perdido y no encontrará el camino,
porque aunque mis venas se parezcan, no son las mismas,
No es aquí el origen.
Y ahora esa canción ronda como ronda el perdido con su recuerdo,
invocando en cada parte de mí esa sensación irreal,
que quisiera que fuera mía.
Esa esperanza me amarra a ti.
Lo sé, no conoces esta canción,
pero por ti resuena pura en mi alma.