Rigodo

SANGRAN LOS CABALLOS

Sangran los caballos.

Los nervios tensados se olvidaron del Quijote

en mi pecho.

Vuelven los ojos locos,los ojos blancos

los ojos maltrechos.

 

Sangran los caballos.

Eran fuertes

eran agiles.

En una noche sorda,oscura

el gesto salvaje se detuvo.

Y el filo de mi humanidad

en clavos no se contuvo.

 

Sangran los caballos.

Se perdian en el horizonte

bajo la amenaza de sicarios vinos.

¡ Escapen escapen ! 

espantados de mi voz

y el agitado tropel

de este tonto honbrecillo.

 

Sangran los caballos.

En las carreras por las pampas

lejanas a mis edades.

Sopla el viento

sopla el viento.

Constelados en la melodiosa frescura

que relincha un sangre pura.

 

Sangran los caballos. 

Y se diluye la sangre

despierta con la naturaleza.

Misterioso de su paso

soñado por una madre

a lo largo de las horas

en que solo se espera

nuevamente La Aurora.