En el recuerdo de mi niñez, entre trompos y canicas,
en la calle polvorienta donde la risa se desbordaba,
entre amigos y travesuras, la felicidad se sembraba,
en cada giro de trompo y en cada tiro de canicas.
Las cometas surcaban el cielo azul, libres y alegres,
nuestros sueños volaban alto, como las cometas en el viento,
en cada carcajada y en cada momento alegre y contento,
en la inocencia de la infancia, donde todo era fiel y segura
Los balones rodaban en el campo, la pasión se encendía,
en cada gol y en cada carrera, la emoción se desataba,
entre risas y abrazos, la amistad se fortalecía,
en el juego y en la competencia, la vida se dibujaba.
En aquellos días de sol y de libertad,
entre trompos y canicas, entre cometas y balones,
se forjaron los recuerdos más preciados de los amigos juguetones,
en la niñez, donde el corazón late con intensidad.
En la inocencia de la infancia, donde todo era fiel y puro,
cada risa era un tesoro, cada juego una aventura,
en el corazón de un niño, la inocencia es la hermosura,
en cada sueño de aquellos días, la magia se asegura.