¿Qué nos sucede cuando nuestra amabilidad no es correspondida? Son muchas las personas, que les ha sucedido en alguna ocasión. Intentamos hacer algo por otras personas y en cambio,recibimos una respuesta airada, o incluso interpretan que buscamos sacar algún beneficio.Ante éste tipo de situaciones, tan sólo cabe pensar, que cada persona, se halla en un grado diferente de evolución espiritual, dando sólo aquello de lo que es capaz. En cualquier caso, la persona genuinamente amable no suele esperar nada a cambio, tampoco se siente ofendida por no haber obtenido reconocimiento, o un trato equivalente. La amabilidad debemos entender que no es un comercio del tipo \"yo te doy esto y tú me das aquello\" La transacción emocional termina en uno mismo, teniendo en la buena acción, su propia recompensa.