Me confundo imaginando
lo que no existe,
pero la realidad es terca
y si la tierra no responde
al cielo recurro.
Necesito las armas
que dan las bendiciones,
si no pienso en rendirme
y nunca me agoto
intentaré arrancarme el corazón,
pero es rebelde
y no para de crecer.
También intentaré
equilibrar la balanza
hacia el lado bueno,
y sepultaré mis sentimientos
con los soles de barro
que cubrirán mi tumba
incorruptible, como yo.