tadeo.m

17

 

Estás ahí,

cuando me escondo

del mundo y

me encierro,

allá,

en el último de los cuartos

que existan adentro mío,

al fondo,

hecho de agua,

cuando cierro la puerta,

ahí,

cuando giro y me doy vuelta

estas vos,

mirándome,

esperando,

(como si fuera esperándome)

con los ojos de noche
oscuros,

profundos

que ahora inundan

el cuarto entero:

entonces

me quedo.