emiliodom

Una infancia sin fin.

 

No hay que olvidar, que las actividades lúdicas, nos ayudan a esculpir nuestro cerebro.Cuando jugamos podemos probar experiencias nuevas, sin poner en riesgo nuestro bienestar físico y emocional. Estamos a salvo precísamente porque estamos jugando.- Al jugar, imaginamos situaciones muy distintas y aprendemos de ellas. Podemos crear posibildades que antes no existían.Establecemos nuevas conexiones cognitivas en nuestra vida cotiadiana. Aprendemos valiosas lecciones y habilidades, sin poner nuestra vida en peligro. Buena parte del juego al que nos entregamos los adultos, consiste en proyectar como va a ser nuestro futuro. Jugamos a imaginar, como sería la casa de nuestros sueños, o la persona que nos encantaría conocer o encontrar para que forme parte como pareja.Nuestra fantasía es una especie de campo de pruebas, donce essayamos situaciones y escenarios.