Pilar Luna

MEDINA ALBAIDA. LA CIUDAD BLANCA

Mi vida se aleja

por esa vereda ondulada

de la hierba mora

donde crecen nobles,

en los senderos,

cuatro ríos verdes.

La ciudad blanca

del viento rebelde,

callejones y palacios

en un cielo de luz y destellos.

 

Susurros en Medina Albaida,

llamada a la oración,

mujeres castas con velo,

manos pintadas con henna

y una brasa en sus iris negros.

En el Palacio de la Alegría,

filosofía, matemáticas y arte,

Aljaferia, con un salón dorado,

casa para los poetas,

melodía de laúdes áureos

que navegan caudalosos

sobre las blancas aguas del Ebro.