Las discusiones son normales
para intercambiar criterios,
pero debemos evitar
ofender o decir improperios.
Discutir en las parejas
es normal y cotidiano,
pero las discusiones deben ser
sin que se nos pase la mano.
La razón debe ser otorgada
al que la tiene sin vacilar
y aceptarla en forma educada
para evitar disimular.
Las discusiones deben ser serias
pacíficas y muy cordiales,
sin tener que gritar
y perder los buenos modales.
Cuando se discute
El control no se debe perder,
para luego pedir disculpas
y tener que retroceder.
Se debe aprender a discutir
sin dejarse llevar por las emociones,
para evitar quedar disgustados
terminando las buenas relaciones.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,17/05/2024.