Cayó el camalote al lago, a penas con los primeros rayos de sol, su color y romanticismo de estar sola, en tal inmesidad, la llenó de regocijo . Era un día luminoso, y también se veía la luna. Que más podría pedir, se vio eterna e infinita en la incomesurable y eternidad del cosmos. Sobrevolo en un instante su vida. Sus buenos y malos recuerdos. Ayy... suspiró y se dio cuenta que no era necesario de vivir otras. Que durante esta había rechazado y amado su ser. Como si hubiera pasado por varias. Era ella pero muchas más danzaban alrededor de ella. También tarareaba interiormente músicas, melodías que había escuchado alguna vez. Estaban presentes perfume de monte y de azares . Un pato, sobrevolo, cerca de ella y cayó a tierra y al agua tal cual camalote.
(rosi12)