Contigo, la noche tenía sentido y no era solo una palabra más en el glosario de la vida, eras capaz de romper el hielo con tan solo una mirada, eras capaz de eso y más.
Eres capaz de mostrarme en tu mirada el universo paralelo de mi realidad, no necesitas argumentos para justificar que me necesitas, o mejor dicho, que nos necesitamos; simplemente eres quien eres.
No necesitamos palabras, tu esencia habla más fuerte, y en el silencio, nos entendemos, dos almas que se buscan y se encuentran.
Serás siempre la persona ideal, porque mejoras cada día, te escondes de la mala vibra y escapas a hurtadillas del desasosiego de la rutina.
Y por eso te necesito, no como amiga ni como conocida, sino como quien desea ser conocida y, a la vez, amiga, esperando que se sume una pequeña nostalgia, de llegar a ser algo más.