¡Qué paz se respira!
Echado boca arriba
mirando el azul del cielo
sin que nadie lo prohíba
como si fuera mozuelo.
Pero soy un abuelo
que requiere reposo,
pues mi cuerpo nivelo
ya un poco patoso.
Se oye el silencioso
rumor del ambiente,
me siento perezoso
y un poco ausente.
No hace falta que cuente
la paz que aquí se respira,
pero sí que comente
que no es ninguna mentira.
Antonio Reina Moreno 4/07/2024