Pena Amarga Pena!
Del alma saco una pena
que por ser pena es amarga
y aunque el corazón descarga
su herida nunca serena.
En las noches sin condena
bajo el manto de la luna
la tristeza se importuna
y en sus sombras se disfraza
mas la esperanza se abraza
a la luz de la fortuna.
El viento lleva suspiros
de un dolor que no se exhala
y en su brisa se señala
el eco de viejos giros.
Los campos son los testigos
de lágrimas y consuelo
donde el cielo azul y el suelo
se confunden en un llanto
que, aunque profundo y quebranto
se disuelve en su desvelo.
Las montañas guardan voces
de pesares olvidados
y en sus ecos renovados
se esconden viejos goces.
Las aves en sus albores
cantan himnos de esperanza
y en su trino la balanza
inclinada hacia la vida
hace que el alma herida
encuentre nueva pujanza.
En el reflejo del río
veo el pesar de mi alma
que en la corriente se calma
y se lleva mi desvío.
La naturaleza, en brío
me ofrece su abrazo tierno
y aunque el dolor sea eterno
la paz en su canto mora
y cada aurora implora
un renacer más moderno.
Voy hilvanando recuerdos
en la trama de mi mente
donde el dolor, persistente
se convierte en acuerdos.
Cada lágrima que pierdo
es semilla en el camino
y en el campo, mi destino
florece en nueva esperanza
donde el alma, en su balanza
encuentra su peregrino!