Soy un hombre que nace con las flores
más allá de una condición humana,
mi nacimiento es amor,
más que una amalgama de cuerpos y de sexo,
es el inicio del tiempo,
de ilusiones sin metáforas,
de rebeliones sin género
de deseos sin excusas,
de sentimientos sin dogmas.
He nacido de la música,
más allá del instinto y las ansias,
emergí del sonido del viento en los árboles,
del claroscuro de la tarde entrando en la noche,
de la nube en libertad sobre el cielo,
en la mirada compasiva del niño,
en el espacio sin fronteras del alma.
Soy la fricción de la entrega y el deseo,
en la sencilla metáfora de tú y yo,
como el tiempo sin relojes,
como el día sin las horas,
aprendiendo del amor lo esencial,
sin religiones ni dogmas
soy el origen del tiempo,
del amor en este nacimiento.