Otxamba Quérrimo

¡Oh, amor!, dulce manera de luchar

El amor, la pasión o la terquedad, como quieras llamarlo…

LEV TOLSTÓI

 

Centón desenfrenado

 

A MÁS DE OTRAS COSAS RARAS
me subleva el olor a beso sin causa,
nuestros cuerpos
al pie de la mirada, dando voces,
en una sola miga de ternura, (5)
tu silencio en el mío,
el paisaje anímico de una sonrisa,
adolescente, esbelta, fugitiva,
que quiere con los siglos murar la eternidad,
hacerse muchedumbre, (10)
y pasa sin usuras,
no por tu luz, sino por tu corteza,
con el don cenital de su alegría…
Ya se desnudó mi sangre.
Ya se desnudó mi sangre, (15)
a orillas de tu abrazo,
como un campo de sol entre dos hielos.
Ya se desnudó mi sangre,
quemando los fríos,
tapándote los ojos con palabras, (20)
sin lazos, sin mensaje, sin conciencia.
Ya se desnudó mi sangre;
otro milagro de la primavera.
Ya se desnudó mi sangre,
y el corazón sin musgo (25)
del que padece memoria,
a dentelladas secas y calientes,
hace rumbo en mis venas.
¡Déjame, déjame fermentar en tu amor!
¡Y ante la eternidad de lo probable! (30)
Aunque ahoguen las dudas,
déjame que me calle con el silencio tuyo,
envuelto entre la sábana de espumas.
Al quererme creaste mi belleza,
y así, dadora de infinito, vas caminando sangre adentro, (35)
irreparablemente,    
como si fuera a amanecer.
¡Que la noche lo diga!
No puedo resistir lo que me gustas.
Te anuncias como la sed, (40)
sin hora ni razón,
con una obstinación enamorada,
y yo, aunque esté callado, doy las gracias,
me dejo decir,
herido mortalmente de vida, (45)
más dos que nunca.
Me inventé una ambición:
probar, y no poder, a despedirme.
Y claro, naturalmente,
todavía más, y cada vez más, todavía, (50)
todo vive, pervive, sobrevive y asciende.    
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Una gota de luna en una botella
yo soy;
tú, (55)
la esquina de la sorpresa,
mi casa y morada,
lugar para este no saber dónde estar,
abierto, un atlas,
ósmosis de sentimientos, (60)
boca rota de amor y alma mordida, 
suspiros y risas, colores y notas,    
aire en que respiro tiempo,
sangre no regresada,
tantas delicias y delirio tanto… (65)
Acércate más, acércate más,
que es probable el milagro de la suerte.
Acércate más,
y si asoma a mis ojos la sed de conocerte,
vierte, viértete sobre mis deseos. (70)
Quiero besarte la risa.
Para que nada nos amarre,
quiero que te desemboques,
cojeando de dicha,
goteando esperanzas, (75)
tiritando como un volcán sin sueño.
Quiero amar a tus monstruos
suavemente en tu oído,
y en invierno, elevar
el edredón de tu regazo (80)
hasta que se despierte
la oscuridad temblando,
íntegramente comestible. 
Quiero decir que estás sacudiendo mi juventud,
como si no temieras, (85)
sobre la piel cambiante del instante,
dar la vida y el alma a un desengaño,
a un imposible.
Tampoco yo.
Y sucesivamente así, (90)
¡aquí estamos!
Como heridos de un mismo pensamiento.
Y juntos.
(El beso nunca es singular).
A veces avanzan separadas tu noche y la mía (95)
si el camino se sienta a descansar,
pero, en algún momento,
las olas, las horas,
como el niño que juega al escondite,
se crispan, vacilan, tiemblan, (100)
haciéndonos reaparecer de nuevo
en lo más genital de lo terrestre.
Y entonces
siento en el alma una alondra cantar.
¡Aprisa, aprisa! (105)
Antes de que la tierra se canse de atraernos,
¡agotemos la vida en la vida! 
¡Desafiemos la tradición,
ese entreabierto lecho torpe y frío!
¡Aprendamos a ignorar (110)
la sutura del límite!
¡Constatemos la evidencia de
tener entre las manos la cabeza de Dios!
¡Somos mucho más que dos!
¡Hagamos hambre (115)
—nuestra ración de tiempo y paraíso—
y por amor seré, serás, seremos,     
siempre, aquello, mañana, cuánto,
para no detenernos nunca ni volver a ser lo que fuimos! (120)
Aunque tú no lo sepas,
tal vez por eso,
llenos de instinto mal disimulado,
tibiamente impregnados de sensación de ver,
se unieron los crepúsculos, y «fue».
¡Qué inevitable y fácil la soledad, contigo!*  (125)

 

 

Todavía: paráfrasis de un pronombre (2024)

En El miserere de los cocodrilos (2024) es el «Centón no. VI»

— — — — — — — — — — — — — — — — — — — —

[*] Todo el poema es un mosaico de versos procedentes de otros autores, un gigantesco cadáver exquisito. A continuación, detallo la procedencia de cada uno de ellos…

TÍTULO    «Carnal fuego amoroso», de José Manuel Caballero Bonald (Las adivinaciones, 1954)
Nº verso    
1    «¡Qué lástima!», de León Felipe (Versos y oraciones de caminante, 1920-29)
2    «Ácido santo», de Enrique Valle (Meningelia, 2004)
3    «Tus gritos y mis gritos en el alba», de Gabriel Celaya (Marea del silencio, 1935)
4    «Marcha nupcial», de César Vallejo (Poemas humanos, 1959, edición póstuma)
5    «Hablen, tienen tres minutos», de Julio Cortázar (Salvo el crepúsculo, 1984)
6    «Pasear contigo», de Luis García Montero (Completamente viernes, 1998)
7    «7» [He cerrado la puerta de mi corazón…], de María Cegarra (Cristales míos, 1935)
8    «Égloga», de Luis Cernuda (Égloga, elegía, oda, 1927-28)
9    «1525 - Prudencio», de Miguel de Unamuno (De nuevo en España I, 1930)
10    «Callejeo» [II - V. Pleno ser], de Jorge Guillén (Cántico, edición de 1950)
11    «Barriada del Pilar», de Luis García Montero (Las flores del frío, 1991)
12    «Te tuve», de Ángel González (Áspero mundo, 1956)
13    «Fotografía de Oriol Maspons en la portada de Caminando por Las Hurdes, de A. López salinas y A. Ferres», de José Luis Puerto (Nombres de la mirada, 2020)
14    «Ya he perdido», de Manuel Altolaguirre (Nuevos poemas, 1946)
15    [«Ya he perdido», de Manuel Altolaguirre]
16    «Sobre mi cuerpo en niebla…» (Romance del camino no. 5), de Ernestina de Champourcín (Cántico inútil, 1936)
17    «Besos» [Hay besos que pronuncian por sí solos…] (¿?), de Gabriela Mistral
18    [«Ya he perdido», de Manuel Altolaguirre]
19    «El ángel desengañado», de Rafael Alberti (Sobre los ángeles, 1929)
20    «Engaño», de Rafael Alberti (Sobre los ángeles, 1929)
21    «Las estrellas (Autobiografía)», de Luis García Montero (La intimidad de la serpiente, 2003)
22    [«Ya he perdido», de Manuel Altolaguirre]
23    «CXV» [A un olmo seco…], de Antonio Machado (Campos de Castilla, 1907-17)
24    [«Ya he perdido», de Manuel Altolaguirre]
25    «La vejez», de Luis García Montero (Completamente viernes, 1998)
26    «Llueve, llueve sobre las cúpulas bruñidas por el beneficio…», de Juan Carlos Mestre (La tumba de Keats, 1999)
27    «29 - Elegía a Ramón Sijé», de Miguel Hernández (El rayo que no cesa, 1936)
28    «Absoluto amor» [Como una limpia mañana de besos morenos…], de Efraín Huerta (Absoluto amor, 1935)
29    «De profundis», de Dámaso Alonso (Hijos de la ira, 1946)
30    «XVII - ¡Carne, celeste carne de la mujer!», de Rubén Darío (Cantos de vida y esperanza, 1905)
31    «Carta al vacío», de Ernestina de Champourcín (Del vacío y sus dones, 1993)
32    «15» [Me gustas cuando callas porque estás como ausente…], de Pablo Neruda (Veinte poemas de amor y una canción desesperada, 1924)
33    «Rima LII» [Olas gigantes que os rompéis bramando…], de Gustavo Adolfo Bécquer (1871, edición póstuma)
34    «El retrato» (soneto), de Ernestina de Champourcín (Cántico inútil, 1935)
35    Combinación de «Larga es la ausencia» [y así vas caminando sangre adentro], de Luis Rosales (Segundo abril, 1972); y del «Canto II» [dadora de infinito], de Vicente Huidobro (Altazor o el viaje en paracaídas, 1931)
36    «Las afueras» (II), de Jaime Gil de Biedma (Las personas del verbo, 1975)
37    «Almuñécar», de Antonio Gala (Poemas de amor, 1997)
38    «Primera canción elbitense» [Otros poemas], de Leopoldo Marechal (Antología poética, 1950)
39    «El desayuno», de Luis Alberto de Cuenca (El hacha y la rosa, 1993)
40    «Encuentro» [I], de Alejandra Pizarnik (Los trabajos y las noches, 1965)
41    «Adolescente», de Dionisia García (El vaho en los espejos, 1976)
42    «V» [Tu corazón, una naranja helada…], de Miguel Hernández (El rayo que no cesa, 1936)
43    «Amistad a lo largo», de Jaime Gil de Biedma (Compañeros de viaje, 1959)
44    «Silencio», de Alejandra Pizarnik (Otros poemas, 1959)
45    «VI - Cortejo tras la toma de Bilbao», de César Vallejo (España, aparta de mí ese cáliz, 1937)
46    «XVIII» [Oh las cuatro paredes de la celda…], de César Vallejo (Trilce, 1922)
47    «Mis amigos de entonces…» [Medida del tiempo], de Josefina de la Torre (Poemas de la isla, en la edición de 1989)
48    «Rogarla, desdeñarme, amarla, huirme…» (soneto de primera mitad del siglo XVII), de Francisco de Quevedo y Villegas
49    «Te resucito», de Pedro Casariego Córdoba (Poemas encadenados, 1977-87)
50    «Nocturno de la alcoba», de Xavier Villaurrutia (Nostalgia de la muerte, 1938)
51    «Triunfo del amor», de Vicente Aleixandre (La destrucción o el amor, 1935)
52    «20» [Puedo escribir los versos más tristes esta noche…], de Pablo Neruda (Veinte poemas de amor y una canción desesperada, 1924)
53    «Luna de los amores», de Leopoldo Lugones (Lunario sentimental, 1909)
54    «Balada del mar no visto, ritmada en versos diversos», de León de Greiff (Tergiversaciones de Leo Legris, Matías Aldecoa y Gaspar. Primer mamotreto, 1925)
55    «Vocales para Hilda», de Gonzalo Rojas (¿Qué se ama cuando se ama?, 2000)
56    «Romance de la guardia civil española», de Federico García Lorca (Romancero Gitano, 1928)
57    «Alma, buscarte has en Mí…» (1577?), de (santa) Teresa de Ávila
58    «XXVII» [Me da miedo ese chorro…], de César Vallejo (Trilce, 1922)
59    «Elegía», de Rafael Alberti (Marinero en tierra, 1924)
60    «7» [He cerrado la puerta de mi corazón…], de María Cegarra (Cristales míos, 1935)
61    «Soneto de la guirnalda de rosas», de Federico García Lorca (Sonetos del amor oscuro, 1984, edición póstuma)
62    «Rima I» [Yo sé un himno gigante y extraño…], de Gustavo Adolfo Bécquer (1871, edición póstuma)
63    «El aire» [III - V. Pleno ser], de Jorge Guillén (Cántico, edición de 1950)
64    «Desde un mar de silencio», de Mariluz Escribano (Desde un mar de silencio, 1993)
65    «Canto II - A Teresa» (v. 164), de José de Espronceda (El diablo mundo, 1840, incompleta)
66    «Transfiguración» [Los espejos], de Pere Gimferrer (Espejo, espacio y apariciones. Poesía 1970-1980, edición bilingüe de 1988)
67    «No verte», de Gerardo Diego (Amor solo, 1952)
68    [«Transfiguración», de Pere Gimferrer]
69    «Miedo» [La sombra de una duda sobre mí se levanta…] (soneto de primera mitad del siglo XX), de Andrés Eloy Blanco
70    «Adonde fueron despeñadas», de Luis Cernuda (Los placeres prohibidos, 1931)
71    «Pétalos», de Josefina Romo Arregui (La peregrinación inmóvil, 1932)
72    «Farewell», de Pablo Neruda (Crepusculario, 1923)
73    «Secreto», de Manuel Altolaguirre (Las islas invitadas, 1936)
74    «¡Dulzura por dulzura corazona!», de César Vallejo (Poemas humanos, 1959, edición póstuma)
75    «Tiempo de mar», de Ernestina de Champourcín (Primer exilio, 1978)
76    «La extranjera», de Beatriz Hernanz (Los volcanes sin sueño, 2011)
77    «Yo no quiero ser recuerdo», de Elvira Sastre (Cuarenta y tres maneras de soltarse el pelo, 2013)
78    «Maitines» [Callad, amantes, y ocupad el labio…], de Antonio Gala (Poemas de amor, 1997)
79    «XXXVII» [Sentir el peso cálido…], de Juana Castro (Fisterra, 1992)
80    «Misa negra» (1893), de José Juan Tablada
81    «Sueño grande», de Gabriela Mistral (Ternura, 1925)
82    «XVIII» [Los muros nada más…], de Luis Cernuda (Primeras poesías, 1924-27)
83    «Poética» [¿poesía liberada o deliberada?…], de Saúl Yurkievich (Rimbomba, 1978)
84    «Mucho más grave», de Mario Benedetti (Poemas de otros, 1973-74)
85    «La cartomancia», de Olga Orozco (Los juegos peligrosos, 1962)
86    «Nocturno de San Ildefonso» [1 - Inventa la noche en mi ventana…], de Octavio Paz (Vuelta, 1976)
87    «Desmayarse, atreverse, estar furioso…» (soneto de principios de siglo XVII), de Félix Lope de Vega
88    Título de un SONETO de Ramón López Velarde [Me arrancaré, mujer, el imposible…] (1905)
89    «Yo» [No sé quién soy…], de Idea Vilariño (No, 1980)
90    «Los formales y el frío», de Mario Benedetti (Poemas de otros, 1973-74)
91    «Llegada», de Nicolás Guillén (Sóngoro cosongo, 1931)
92    «El tren expreso» [III - Canto primero: La noche] (1871), de Ramón de Campoamor
93    «El alfarero», de Pablo Neruda (Los versos del capitán, 1952)
94    Una de las greguerías de Ramón Gómez de la Serna (primera mitad del siglo XX)
95    «Naturaleza despistada», de Nerea Delgado (Los pájaros sabrán, 2018)
96    «Canto V», de Vicente Huidobro (Altazor o el viaje en paracaídas, 1931)
97    «Carta II», de Idea Vilariño (Poemas de amor, 1957)
98    «Las olas, las horas…», de Alfonsa de la Torre (Plazuela de las obediencias, 1969)
99    «Mi retrato», de María Elvira Lacaci (Humana voz, 1956)
100    «Buenos Aires» [Exaltadas], de Alfonsina Storni (Languidez, 1920)
101    «El esperado» [Al fin llegó el esperado…], de José Lezama Lima (Fragmentos a su imán, 1977, edición póstuma)
102    «II - Del aire al aire» [Canto II - Las alturas del Machu Pichu], de Pablo Neruda (Canto General, 1950)
103    «En la India», de Blanca Andreu (El sueño oscuro, 1994)
104    «VIII. A Margarita Debayle», de Rubén Darío (Poema del otoño y otros poemas, 1910)
105    «El puente levadizo» [Hoy 14 de diciembre de 1953…], de Braulio Arenas (Poemas: 1934 - 1959, 1959)
106    «Lo que esperamos» [Embelecos], de Oliverio Girondo (Persuasión de los días, 1942)
107    «Canto I», de Vicente Huidobro (Altazor o el viaje en paracaídas, 1931)
108    «Himno a las mujeres libres» (1937), de Lucía Sánchez Saornil
109    «Elegía», de Luis Cernuda (Égloga, elegía, oda, 1927-28)
110    «Finjamos que soy feliz», de (sor) Juana Inés de la Cruz (Inundación castálida, 1689)
111    «Winter, Paul Klee», de José Luis Puerto (Nombres de la mirada, 2020)
112    «A Leopoldo de Luis», de Gabriel Celaya (El corazón en su sitio, 1959)
113    «Lo inefable», de Delmira Agustini (Cantos de la mañana, 1910)
114    «Te quiero» [Tus manos son mi caricia…], de Mario Benedetti (Poemas de otros, 1973-74)
115    «El arroz» [Vietnam: primeros planos], de Ángela Figuera Aimerich (Obras completas, 1986, antología póstuma)
116    «Piedra de sol», de Octavio Paz (Libertad bajo palabra, 1957)
117    «Soneto LXIX», de Pablo Neruda (Cien sonetos de amor, 1959)
118    «La paz, la avispa, el taco, las vertientes», de César Vallejo (Poemas humanos, 1959, edición póstuma)
119    «Elegía», de Salvador Novo (Nuevo amor, 1933)
120    «Aunque tú no lo sepas», de Luis García Montero (Habitaciones separadas, 1994)
121    «Habla el humo en el viento de la manzana», de Pedro García Cabrera (Dársena con despertadores, 1936, aunque inédita hasta 1980)
122    «En los días de lluvia» (I), de Luis García Montero (El jardín extranjero, 1983)
123    «El espejo», de Jenaro Talens (Víspera de la destrucción, 1966-68)
124    «Rima XXXII» [Pasaba arroyadora en su hermosura…], de Gustavo Adolfo Bécquer (1871, edición póstuma)
125    «La casa», de Pilar Paz Pasamar (La soledad contigo, 1960)