DERROTA DE LOS REPROCHES
Cual arena dorada entre los dedos
se escurren en mis manos tus dorados cabellos
mientras en tu cuello de marfil cincelo
una noche soñada con mis labios de fuego
Cual barco que atraca en el muelle
llega mi cintura desnuda a tu cadera candente
y como desembarcan los pasajeros alegres
así desembarca todo mi tesoro en tu vientre
que lleno de oro, tiembla y se estremece
Hasta que cansados de goce y amor
nos sorprende el final de la noche
instante en que desde la ventana, sin pudor
nos sonríe una luna cómplice
celebrando la derrota de todos los reproches.
SANTIAGO ALBOHERNA