Te recuerdan las calles
Me saludan las esquinas
Hoy la memoria no lleva prisa
Tú, un solitario árbol asentado a orillas del camino
Yo, una flor temerosa de bailar en el vaivén de tu follaje
Tu singularidad eclipsando mis horas
Mi cabello sucumbiendo a tu deseo
Juntos fuimos mucho más que una tarde de invierno
Y una calle acorralada por la lluvia
Más que un perfume sugestivo
Y la sagacidad intermitente de cuatro paredes
Más que una conclusión precipitada
Y una verdad impuesta por los malos presagios
Fuimos fuego desafiando la calma:
Un ensayo para el debut de la existencia
MSM Guijarros & Perlas®