Albin Lainez

estaciĆ³n fatal

 

 

el viento arrea los ojos

hacia la plenitud invernal

borlando campiñas con

austera humedad de páramo

cadáveres en floración

danzan un ritmo mortuorio

y el felino nocturno va trepando

oxidadas verjas de un manicomio

 

gritos lejanos estremecen mi valor

mientras me siento a esperar

las nieves que cubran

esta piel unánime

 

deambulan víctimas posibles

por el suburbio en penumbras

y el piano hondo repica

tañendo la melodía recurrente

en mi cabeza

 

sujeto el metal aguzado

dentro del abrigo

que disimula mi extrema delgadez

 

aún no es hora

 

cuando caiga esa sutil helada

dejaré el refugio

para salir a cazar

antes de que lo adviertan