jvnavarro

DIARIO DE VERANO XXXVI (LA LUCIDEZ DE UN SEGUNDO)

 Hoy me he olvidado de algo
y me da rabia ello
y no me da risa.
 
En este andar por el día
me dejé la responsabilidad de escribir
un poema
olvidado en una esquina.
 
Menos mal que solo era esto
y la vida del universo no dependía
de esta dejación mía
de no estar en todo 
consciente de lo que hacia.
 
Ha corrido hoy el día
en todo muy deprisa,
será porque había pruebas de velocidad
en las Olimpiadas,
será porque he imprimido más corazón 
a esto de apurar las horas 
estirando los pies, 
montaña abajo, montaña arriba.
 
Solo la lucidez de un segundo
vale por toda una vida
si bien analizamos 
la polinización biótica de las plantas
a costa de las abejas, abejorros  y avispas.
 
He comprendido sin abrir 
página de libro alguno
que dependemos de lo que somos
y si en nuestro pasear 
por allí donde todo es poesía
nos encontramos 
 con algo que no nos gusta,
vale la pena olvidarse uno
de lo que hacia,
aparcar las ideas
y motivarse aunque así sea
echándose un chapuzón en una piscina.