Soy, porque siento y percibo la oscuridad, la vibración, la alegría y la tristeza, todo ello parece lejano pero en mi universo minúsculo es real y palpable, un solo sonido lo rodea todo, es un latido, el reloj que guía mi reciente existencia, el que armoniza como una orquesta la formación de lo que será mi cuerpo y conformará mi cerebro, aquí, en éste ambiente cálido y húmedo me siento seguro, cada latido, como la partitura de una orquesta va organizando mi anatomía, consciente con la multiplicación de mis células y su metamorfosis: las que van conformando mis extremidades, mis órganos, es maravilloso ver cómo esas células amorfas van adquiriendo formas definidas, una fisionomía perfecta, hermosa, inteligente, del interior al exterior, el tiempo pasa y en el cuerpo de éste ser a quien amo profundamente el mío se gesta sin interrupción...
Soy como ella, una versión diminuta pero indiscutible, pero algo no está bien, su corazón se ha vuelto irregular, su cerebro me manda señales que me inquietan, tal vez no se había percatado de mi existencia, tal vez en el instante en que me engendró carecía de deseos o esos deseos estaban enfocados en otro fin; mis percepciones son más claras conforme mi cuerpo se fortalece pero me duelen, me duelen porque la orquesta que me organizaba se ha desentonado...
Soy indeseable, eso es lo que deduzco, la voz de mi madre es despectiva al referirse a mi y me punza con mil agujas cada vez que lo escucho, no conozco el lenguaje pero sí las emociones, y las suyas enturbian mi desarrollo, tal vez sea sólo una reacción consecuente al ambiente que la rodea, pobrecita, está sufriendo y eso me duele, me duele tanto...
Soy un problema, una cifra más en un mundo sobrepoblado...es extraño...desde la bóveda azul profundo de donde lo miré parecía tan largo y ancho, con sus paisajes inmensos y desiertos, con sus mares llenos de criaturas, con sus aves cruzando sus cielos, con sus ciudades bulliciosas y tanto deseo tuve de recorrerlos que el ángel que me acompañaba me ayudó a descender, pero ahora...pensé que mamá era el mismísimo ángel que me había acompañado, el ángel que me ayudaría con ternura a entender cómo funciona éste mundo que tanto me atrajo, pensé que mi viaje sería largo y que disfrutaría y mamá disfrutaría conmigo, yo por mi parte estoy dispuesto a sufrir a su lado si es necesario, pero ahora, en éstos momentos en que mi cuerpo está definido, en los que ya puedo moverme, estudiarlo y que mi mente está atenta y absorbe todo el exterior a través de mamá tengo miedo, miedo su enojo, sus dudas; no me habla, no me acaricia, conspira, todos le dicen que yo le estorbo, que sin mí podría retomar su vida, sus imágenes son de hambre, de fatiga, de gustos insatisfechos, de cuerpos deformes, cuánta frustración he recibido en tan poco tiempo...
Soy un problema, he derrumbado todos sus planes, no quiere cargar conmigo a todos lados, no quiere desvelarse ni escucharme llorar ¿tan sola estás mamita? ¿no hay nadie más a tu lado que te ayude, que te anime, que te oriente? ¿nadie que te hable de vida y no de muerte?podrías ser mi heroína, mi luz, podrías acunarme y yo sonriendo en mis gorgoteos decirte todo lo orgulloso que estoy de ti, que tu valor me inspira, que estoy agradecido y feliz de conocerte y con tu ayuda compensaría con creces todo tu esfuerzo...
Hay un remedio, pero no para mí, yo no cuento, yo no tengo un Cireneo que me ayude a llevar ésta cruz, nadie me escucha cuando lloro, nadie sabe que a pesar de estar escondido soy capaz de amar ni se enterarán de mi enorme deseo de vivir, a mamá le han dicho que el remedio es seguro, que no sufrirá, que es su derecho, ¿de verdad lo cree? nadie es tan íntimo a ella como yo, yo necesito que ella sepa que la amo, que la necesito y como a mi, su ángel le ayudará a levantarse cuando sus fuerzas flaqueen, necesito gritarle que la entiendo, pero no conllevo todos esos gastos que ella se imagina, que sólo necesito su amor y su fe, que busque ayuda sincera, que no se deje engañar...
Hay un remedio, pero tan monstruoso, un remedio que me destruye y pone en riesgo la vida y la salud de mamá, por más que cacareen lo contrario, un remedio que está de moda, un remedio que pesará sobre la conciencia de mamá, un remedio que no nos permitirá despedirnos, siento su indiferencia y me angustia ¿no le interesa saber si soy niño o niña?¿si tengo sus ojos, su cabello?¿no siente acaso en el silencio mi corazón al par del suyo ni le conmueven mis movimientos?¿no le interesa verme aunque sea a través de una pantalla mientras me chupo el dedo?...
Hay un remedio, solo uno: mi muerte, la ley de los hombres está de su lado, la ley delos hombres allana el camino de mi sacrificio y ¿con qué fin? no tendré tumba, ni siquiera una mortaja, mis miembros descuartizados irán a la basura , para la ley de los hombres no existo, no tengo siquiera un nombre,tan solo una etiqueta: \"aborto\", mi muerte quedará impune ante ley de los hombres, pasaré a engrosar la estadística silenciosa, nadie rezará por mi, para que yo cure completamente ese dolor y pueda ser recogido por un ángel que me lleve a Dios, nadie lamentará mi partida, las enfermeras, los doctores que se encargarán de despedazarme lo harán a sangre fría como si extirparan un tumor pero Oh Dios, durante mi agonía yo repetiré una y otra vez : perdónalos, Señor, porque no saben lo que hacen...