María García Manero 🌸

Bajo el palmar

Ella esperaba nerviosa

debajo de aquel palmar;

sus mejillas sonrosadas

y sus labios de coral.

Sus ojos, un par de almendras,

con mirada virginal,

su cuerpo, joven y casto,

ya con ganas de pecar.

Solo quince primaveras;

aún no sabía amar,

pero el amor ya llegaba

con fresco aroma a verdad.

Él era un chico del pueblo,

ojos llenos de bondad;

la sinceridad, su canto

la juventud, su versar.

Veloz como una saeta

llegó hasta aquel palmeral

donde lo esperaba un ángel

con el que quiso volar.

Se encontraron en un beso

que hizo estremecer al mar

y se vistieron las olas

de nácar y de cristal.

Mil abrazos que acarician,

caricias al abrazar,

los dos vestidos de arena,

de piel, sexo, viento y sal.

Dos cuerpos, un corazón,

descansan sobre su paz

con ilusiones de “siempre”

y sueños de “eternidad”.

El sol quería mirarlos

pero tuvo que escapar,

pues se acercaba la luna

con rostro primaveral.

Y las sombras cobijaron

ese amor de tierna edad

que nació entre sol y luna

debajo de aquel palmar.