Soy el médico de pájaros disecados tengo garabatos en mi escaso pelo, veintiún años son la vida de tres gatos, no puedo olvidar este puto frío que hace en invierno.
No soy el de la foto de mi carnet, y de la identidad que tengo, ni pienso ni hablo.
Me estrello constantemente contra las rocas de mis palabras, no tengo equilibrio mental y tú lo sabes, por eso todos los martes por la noche sin venir a cuento te digo cuánto te amo.
Toda la culpa es del sueño donde tú eres la protagonista y yo tú esclavo, esa mezcla de dos no me gusta y siempre que te lo digo acabamos discutiendo.
Todo es un espejismo que pasa delante de mi cuando estoy deprimido.
Me siento un alfiler sin cabeza perdido en una caja de costura olvidada , y tú ahí sentada me miras y sigues riendo.
Siempre me quedo a oscuras escribiendo mis penas, hasta que mis ojos mueren de cansancio en el dichoso vacío .
Mael Lorens