alicia perez hernandez

Nadie como tú…

Nadie como tú…

Te extraño a veces en la mañana al despertar y tú no estás.

En las mañanas tomando mi café y fumando un cigarro te extraño.

Otras veces te extraño cuando veo a alguien parecido a ti.

Te extraño cuando no me puedo dormir y quisiera que estés aquí conmigo y que seas mi medicina para el insomnio. 

Deseo que te fundas en mi piel y viajemos en sueños juntando nuestros cielos y tengamos encuentros nocturnos prohibidos.

Que seamos protagonistas de una película para adultos y hagamos el amor toda la noche y juguemos a ser artistas de los que se meten la lengua cuando se besan y hacen el amor.

Quiero que tengamos fantasías y seamos los protagonistas de la película “PECADO ORIGINAL” tú seas el “Zorro” Antonio Banderas y yo Angelina Jolie.

No hagas caso a todas estas estupideces solo que no tenía sueño

y pensé idioteces contigo haciendo una película para adultos.

Pero valdría la pena que un día hiciéramos todas estas fantasías.

Son las 3 a.m. y te extraño tomándome una copa y fumándome un cigarro. Pienso en cuántos kilómetros me faltan para llegar a ti y tenerte en vivo y a todo color, más bien de cuerpo presente, disfrutarte toda la noche en mi cama, grabando la película.

Bueno, lo que falta ya para que se termine la noche, ya amaneció y sigo extrañándote, nadie como tú, para quitarme el sueño,

desvelarme extrañándote todas las noches que estas ausente.

Hagamos algo mientras amanece juntemos nuestros insomnios.

Amémonos siempre lo mismo para no olvidar lo olvidado.

Nadie como tú, poeta atrevido, pervertido y mañoso.

El único que me desvela todas las noches… me robas el sueño.

Te olvidaré el día que ya no te extrañe. 

Alicia Pérez Hernández… México 

No es la pluma la que escribe, es el alma 

Todos los derechos reservados©

Fragmento de Nocturno a Rosario de Manuel Acuña

IV

Comprendo que tus besos
jamás han de ser míos,
comprendo que en tus ojos
no me he de ver jamás,
y te amo y en mis locos
y ardientes desvaríos
bendigo tus desdenes,
adoro tus desvíos,
y en vez de amarte menos
te quiero mucho más.

V

A veces pienso en darte
mi eterna despedida,
borrarte en mis recuerdos
y hundirte en mi pasión
mas si es en vano todo
y el alma no te olvida,
¿Qué quieres tú que yo haga,
pedazo de mi vida?
¿Qué quieres tu que yo haga
con este corazón?