Oveja negra, te llaman por ir en contra de la corriente.
Oveja negra, cual maldición, te abres paso entre rebeldías.
Oveja negra, criticada, muchas veces castigada, otras juzgada por ir en contra del mundo, incluso de tu propio rebaño.
Te niegas a ser rebaño ciego y complaciente,
Oveja negra, que caminas sola bajo cielos oscuros,
con la mirada firme, buscando la propia verdad.
El viento sopla en tu contra, pero no te frenas;
cada paso que das, deja una huella profunda,
en un terreno donde otros no quisieran pisar.
Oveja negra, que desafía lo que está establecido,
tu diferencia es tu fortaleza, tu rebeldía, tu libertad.
Y aunque te llamen con desprecio...
Oveja negra, incomprendida pero nunca vencida, sigues caminando siendo eternamente fiel.