José Fas Fonfría

A UN AMOR INDECISO.

A UN AMOR INDECISO

Tenemos que hablar cariño,
acomódate aquí a mi lado.

Tras una larga y estudiada meditación…
no quiero en tu cruda decisión influir,
pero te diré algo, a modo de confesión,
y quiero escucharte, sin llegar a discutir.

Habla sin prisas, claro y con franqueza,
siempre te he escuchado, y respetado,
siempre admiré en tus palabras la pureza,
y, sé que piensas, que lo nuestro, se ha acabado.

Ahí tienes la puerta, puedes irte al instante,
igual que supiste entrar, seguro sabes salir,
sé que pensarás, que soy creído y petulante,
y por lo mismo que costaste, otra puedo conseguir.

No creo que me estés a prueba poniendo,
no me cuentes enredos, y entra en razón,
yo por si acaso, ya me estoy previniendo,
y cuidado…, que no va a sangrar mi corazón.

Ándate con ojo, y controla las emociones,
no me engañes, ni quieras hacerte la mártir;
si decides quedarte será con condiciones,
sí exiges más de lo que ofreces, puedes partir.

Si deseas saber la veracidad de mis intenciones,
te voy a decir lo que quiero, y no te voy a mentir,
sabes que soy sincero, no te surjan preocupaciones,
para ti, yo, el primero, más claro no te lo puedo decir.

No vengas con suspicacias, y pasa de la desconfianza
a mantener la certeza, de que yo, no te voy a fallar,
apelo a la diplomacia, mantén tú, viva la esperanza,
ten fe en el jurado, cuando tus pecados vayan a juzgar.

No quiero aumentar tu desaliento, todo debe mejorar,
con cariño, y con sincero y justo arrepentimiento,
la confianza entre nosotros se tiene que acrecentar,
y nunca vuelvas a tener, ningún otro remordimiento.

Tienes que ser seria nena, y déjate de paparruchas,
si te entregas y das todo aquello que llevas dentro,
recibirás como premio, todo por lo que vives y luchas,
y, no vuelvas a desconfiar, ya sabes por ti lo que siento.