Algunos son como JÚPITER, destinados a ser una gran estrella, pero acabaron fallando.
Otros como MERCURIO, tuvieron que brillar estando cerca del sol.
Otros como VENUS, eran hermosos hasta que el calor los acabo destruyendo.
Otros como SATURNO, están poco a poco perdiendo sus anillos.
Algunos son como la TIERRA, porque a veces nos olvidamos de la belleza que se esconde en su interior.
Otros son como MARTE, porque dicen que hace millones de años también hubo agua sobre su superficie.
Otros como PLUTÓN, acabaron siendo demasiado pequeños para ser un planeta.
Otros son como URANO, crecieron cerca del sol y acabaron alejándose poco a poco.
Algunos como las SUPERNOVAS, que en su día fueron estrellas, pero no pudieron aguantar el brillo de su interior y acabaron explotando.
Otros como el COMETA HALLEY, brillaron con intensidad un día y acabaron desapareciendo en el cielo.
Y hay algunos que son como el SOL, que piensan que brillaran siempre sin importar lo que pase, sin ser conscientes que ese brillo acabara apagándose algún día.