En ocasiones sencillamente corro,
huyo,
sin pensarlo siento que lentamente me alcanza
y no me dan miedo las sombras
con las que lucho de noche,
o los ojos fijos que me miran en la oscuridad,
el silencio absorto que me grita en la cara
o el sentimiento vacío que trae la canción,
parece que los recuerdos se me hacen pocos
en un mundo cuasi perfecto carente de abrazos
y por mucho lejos de lealtad.
En ocasiones sencillamente corro,
ahora me duelen las rodillas,
no tengo fotos de mi niñez,
mucho menos de mi adolescencia
y duele tener más imágenes de terceros en mi mente
mientras siento que lentamente me alcanza.
Me cuestiono en silencio
¡Soy realmente tan fuerte?
o sencillamente debo de serlo.
En ocasiones sencillamente corro,
y sus ojos en la oscuridad no me dejan de mirar…